Blogia
casiazul

Noches ladradas

Noches ladradas

Hay noches y noches.

La de ayer fue una noche de ladridos. Uno comenzaba y otro continuaba. Y así repetidos ecos de ladridos me han mantenido despierta.

La noche era calurosa y unos mensajes de mis viajeros me han despertado aún más.

Su viaje les ha llevado tan lejos que parecen estar en otro mundo. Sin darse cuenta del desfase horario, me envían imágenes maravillosas que saboreo con deleite.

Imagino sus sensaciones, sus ojos abiertos de par en par para no perder ni un detalle de ese mundo tan conocido a través de las películas  y los libros, los comics y las series de tv.

Una de ellas me sorprende por su grandiosidad: el puente de Brooklyn.

Podría haberla buscdo en internet, pero la he buscado en mi corazón. Mi hijo es quien se sienta en el banco, en ese banco tan cargado de historias y personas recordando historias, que parece mentira que pueda soportar tantas emociones juntas...

Ayer fue una noche en la que los perros ladraron y yo soñé con estar sentada en un banco, al lado de un enorme puente...

0 comentarios