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casiazul

De la otra crisis

De la otra crisis

Después de muchos días grises, hoy he visto el azul del cielo. Empezaba ya a ponerme de mal humor tanta lluvia y tanto gris.

He salido después de comer al jardín con Urko. Le he tenido que bajar de sofá en brazos y obligarle a salir. Sigue luchándo contra su enfermedad, pero todos sabemos que ya está vencido. Es cuestión de tiempo y de que yo tome la dolorasa decisión de acabar con sus días. Cuando se acurruca a mi lado y se queja quedamente me invade una tristeza enorme.

Su salud aún es pasable, pero cada día está un poco más decaído. Aún tiene arrebatos vitales, pero la tónica es el deterioro lento de su pequeño cuerpo.

Esta es la crisis que más me preocupa. La otra ya me ha llegado, pero me duele menos. Simplemente me ha hecho pensar un poco en el sistema aborrecible que tenemos, en los rehenes de la economía en que nos han vuelto y en que mi dinero retenido no irá a ayudar a nadie en concreto sino a pagar una deuda que yo no he contraído. Pero como no entiendo de grandes economías y sí de grandes especuladores, me limito a pillarme un rebote de mucho cuidado y a verlas venir, que no queda otra, de momento.

Veo a Urko tumbado al sol, cerca de la puerta. Le sentará bien.  Me voy con él para disfrutar del verde de los paraísos y el viento que los mueve. Hay cosas que no podrán comprar...

2 comentarios

Rafael Castillejo -

Devuelvo tu visita a mi "viejo desván" y tu amable comentario en mi libro.

Un abrazo muy fuerte.

Koldo -

Dicen algunos que el ser humano es de los muy pocos que "es consciente". De sí mismo; del concepto antes-pasado y después-futuro; de tantas y tantas cosas, como ser "superior".
Yo no lo tengo tan claro. Seguro que de tanta "superioridad" de la que alardeamos, somos tan torpes que no nos damos cuenta que la mayoría de los seres vivos deben tener, en mayor o menor medida, ese tipo de consciencia.
Los perros, de tanta proximidad y convivencia con su amo y otros muchos seres humanos, seguro que están muy "contaminados" de emociones y sentimientos menos perrunos y más humanos.
No sé si Urko es consciente de lo que le está ocurriendo. Parecen mucho más estoicos que nosotros (?). Seguro que, también en esto, a más de uno podrían darle ejemplo. De vida y de muerte. Espero que sufráis todos lo menos posible.
Que disfrutes de este estupendo y soleado fin de semana que nos anuncian.